El poder político de los medios de comunicación social como instrumento para el derrocamiento de los jefes de estado, es conocido en el mundo más de diez años. El primer caso está relacionado con las Filipinas. 17 de enero 2001, los leales en el Congreso de Filipinas votó a favor de rechazar la obarczających evidencia clave acusado de corrupción, el presidente Joseph Estrada. Después de dos horas del anuncio de la decisión, miles se reunieron para Flipińczyków Epifani de los Santos Avenue en el corazón de Manila. La protesta se inspiró en gran parte, fue derrotado en una cadena de mensajes SMS, que contenía el siguiente texto: Go 2 EDSA. Use BLK. (Ir a la Epifani Avenida de los Santos. Vestido de negro.).
El mensaje recibido más de siete millones de filipinos, de modo que la multitud de manifestantes creció en dos días a casi un millón de personas. La rápida evolución de alarmó al comité que se ocupa de la investigación de la malversación de fondos presidenciales. La evidencia afirmando que Estrada había sido admitido, y el 20 de enero el presidente se vio obligado a dimitir de su cargo. Este evento es considerado como un precedente en lo que respecta a los medios de comunicación social un papel crucial en el derrocamiento del líder del país. Estrada admitió que "la generación de smsująca" le llevó a caer.
Desde entonces, los teléfonos móviles e Internet se han organizado protestas zwielokrotniały fuerza en todas las latitudes. En 2004, el SMS ha llevado a la derrota del Partido Popular en las elecciones en España, y acusado injustamente de los atentados de Madrid con los separatistas de ETA, el primer ministro José María Aznar tuvo que dejar el cargo. En 2009, los comunistas perdieron el poder en Moldavia tras las manifestaciones, que fueron coordinadas por los teléfonos móviles, Facebook y Twitter. ¿Cuál es la fuerza de este último también demostró una contra el gobierno de Bielorrusia en 2006 y, finalmente, sometido por la "revolución verde" en Irán en 2009.
No comments:
Post a Comment